«Un Libro, Un Árbol, Un Niño» extendió sus esfuerzos educativos y ambientales a los Centros de Educación Básica Patricio Rápalo y República de Chile, logrando un impacto significativo en la comunidad.
Durante esta inspiradora jornada, se plantaron 300 árboles en las áreas de ambas escuelas, marcando un paso significativo hacia la creación de un entorno más verde y sostenible. Los alumnos, junto con el personal escolar, participaron activamente en esta actividad, aprendiendo sobre la relevancia de los árboles en nuestro ecosistema y desarrollando una conexión más profunda con la naturaleza.
Además de la plantación de árboles, se entregaron un total de 200 libros, 100 para cada centro educativo. Estos libros, cuidadosamente seleccionados, están destinados a abrir nuevas ventanas de conocimiento y creatividad para los estudiantes. Fomentar la lectura desde temprana edad no solo mejora las habilidades académicas, sino que también enriquece el desarrollo personal y emocional de los niños.
La combinación de actividades de reforestación y distribución de libros tiene un impacto duradero, ya que promueve valores esenciales como la responsabilidad ambiental y el amor por el aprendizaje. Los jóvenes participantes no solo están contribuyendo a un entorno más limpio y saludable, sino que también están cultivando hábitos de lectura que les beneficiarán a lo largo de sus vidas.
En resumen, la campaña «Un Libro, Un Árbol, Un Niño» no solo embellece los espacios escolares y provee materiales educativos, sino que también planta semillas de conciencia y conocimiento en los corazones de los jóvenes. Iniciativas como estas son fundamentales para formar generaciones futuras comprometidas con la protección del medio ambiente y el desarrollo de una sociedad más educada y consciente.
¡Juntos somos el cambio!
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